experiencia nomada digital

Ser un nómada digital, siempre había fantaseado con esa posibilidad o utopía de trabajar viajando. Algunos de mis referentes tenían ese estilo de vida soñado por muchos, cuando estaba en la oficina pensaba en cómo será esa vida, si sería posible o no. Ahora, después de 8 meses como nómada digital ya puedo escribir en primera persona que se siente al ser un nómada digital y llevar el trabajo en la mochila.

En esta entrada quiero resumirte mi opinión después de haber probado esta manera de vivir durante todo este tiempo, lo más bueno, lo menos bueno y aquellas experiencias que me han marcado en este tiempo. Haré un desglose de los países visitados teniendo en cuenta que la situación del Covid-19 ha variado los planes iniciales del viaje. Esta entrada es llevar a la práctica este artículo en el que te relacionaba la idea de trabajar viajando para perseguir mi libertad financiera.

¿Qué es un nómada digital?

Un nómada digital usa la tecnología para trabajar desde cualquier parte del mundo. No importa donde estés siempre y cuando tu conexión a Internet sea buena y tengas una idea en la cabeza. La revolución digital ha llegado para quedarse y con la pandemia del Covid el tele trabajo o trabajar desde casa va a llegar a ser una realidad más pronto que tarde. Ahora bien, no es lo mismo trabajar para tu empresa que trabajar para un negocio que has creado tú mismo.

Ser tu propio jefe te da más libertad para hacer lo que quieras y trabajar en aquello que te gusta, después de trabajar en una empresa cumpliendo órdenes la diferencia es abismal. En mi experiencia he podido comprobar que si te dedicas a algo propio y que te apasiona la vida es mucho más plena, eso se nota en la creatividad, en la energía y la pasión que le dedicas a lo que haces cada día. Las finanzas personales y el emprendimiento han sido mi trabajo como nómada digital en todo este tiempo y espero que sean mi camino para muchos años.

Vivir como un nómada digital te brinda la posibilidad casi infinita de conocer nuevos lugares y experiencias. Para mí tres semanas de vacaciones no eran suficientes para explorar y sentir todas esas experiencias que quería vivir, si mi valor predominante es la libertad y el valor de mi dinero lo quiero medir en experiencias ser un nómada digital es una gran manera de ser más libre.

¿Es posible trabajar viajando?

trabajar viajando

Era una de mis grandes dudas antes de lanzarme, la teoría indicaba que era posible, sin embargo, quería comprobarlo de primera mano. Después de haber preguntado a varias personas que lo habían hecho no sabía si estaría preparado para ello. No es lo mismo estar de vacaciones que trabajar viajando, hay una gran diferencia.

En todo este tiempo he descubierto que es posible hacerlo, que se puede llevar a cabo. Eso sí, hay que ser muy disciplinado y dedicar cada parte del tiempo a lo que corresponde. Yo por ejemplo he aprovechado tardes, noches o cualquier momento disponible para trabajar, daba igual el día que fuera, un domingo por la noche o un viernes a primera hora de la mañana. Y no considero que tenga habilidades extraordinarias, muchos de mis compañeros digitales también han conseguido hacerlo, todos nos formamos en la escuela nómada digital, una gran comunidad que vuelve a abrir sus puertas desde el 17 al 21 de marzo.

escuela nomada digital comunidad

El hecho de trabajar viajando hace que todo tenga un ritmo más lento, se trata de hacer slow travel y viajar muy despacio. Tenía clara la teoría, pero en el inicio las ganas e hizo que el ritmo fuera más rápido que el aconsejable. Uno de los aprendizajes que aprendí y de los grandes consejos que me dieron es que no por llegar a todo tu experiencia va a ser mejor, todo lo contrario. He tratado de disfrutar tanto del trabajo como del viaje y bajar el ritmo del viaje es una de las claves para conseguirlo

Mi viaje como nómada digital

inicio viaje nomada

Mi viaje como nómada digital no es en solitario, mi mujer también es nómada digital y me acompaña en toda esta aventura. Sin ella, las cosas serían muy diferentes, creo que un viaje compartido es mucho más pleno. La idea inicial del viaje ha sido muy distinta a la realidad, cuando seleccionamos los países y la ruta inicial tuvimos en cuenta el tiempo, pero luego la propia aventura y los imprevistos como el coronavirus te van guiando por otros lugares.

  • Plan inicial y fechas aproximadas:
    1. Noruega (1 octubre – 21 octubre),
    2. Tailandia (21 octubre – 15 noviembre)
    3. Laos (15 noviembre – 6 diciembre)
    4.  Camboya (6 diciembre – 1 enero)
    5. Vietnam (1 enero – 28 enero)
    6. Filipinas (28 enero – 21 febrero)
    7. Australia (21 febrero – 21 marzo)
    8. Nueva Zelanda (21 marzo – 21 abril)
    9. Indonesia (21 abril – 21 mayo)
    10. Borneo / Singapur (21 mayo – 31 mayo)
    11. Malasia (1 junio – 21 junio)
    12. Birmania (21 junio – 15 julio)
    13. Japón (15 julio – 15 agosto)

La idea inicial era ver estos países y culminarlo en una de las experiencias principales que quería vivir: Los Juegos Olímpicos, que finalmente pasan al 2021 por la pandemia. Este plan tenía de todo, países baratos, normales y caros sobre el papel y muchos contrastes, pero como decía el resultado del viaje ha sido muy diferente:

  • Países y fechas reales:
    1. Noruega y Dinamarca (10 octubre – 27 octubre)
    2. Tailandia (27 octubre – 25 noviembre)
    3. Malasia (25 noviembre – 7 enero)
    4. Singapur (7 enero -10 enero)
    5. Filipinas (10 enero – 6 febrero)
    6. Australia (6 febrero – 18 marzo)
    7. Nueva Zelanda (18 marzo – mediados de julio si me dejan volver 😉 )

Como podrás observar se parece poco al plan inicial, una de las grandes enseñanzas de este viaje es que es mejor que dejes lugar a la improvisación. Un viaje de este estilo es muy vivo y los imprevistos surgen, evidentemente el mayor ha sido el covid, pero otras veces el transporte, el tiempo o el propio trabajo hacen ir más deprisa o más despacio. De todos los países voy a seleccionar una foto y una experiencia con foto, es algo muy difícil porque todo este tiempo está dando para vivir experiencias únicas cada día.

Etapa 1: Noruega y Dinamarca

noruega nomada digital

El primer destino del viaje fue Tromso, los países nórdicos son buenas escalas para ir en vuelo directo hasta Tailandia. La combinación mejor en precio era desde Copenhague así que tres semanas recorriendo en coche Noruega era el plan elegido. Todavía recuerdo esos paisajes otoñales increíbles, desde las Islas Lofoten hasta los imprescindibles fiordos que puedes recorrer durante meses. Un país tan bello como caro, lleno de peajes y gasolina cara a pesar de ser uno de los principales productores de petróleo.

preikestolen noruega

Mi experiencia destacada: La subida al Preikestolen, si por algo destaca Noruega son los fiordos, montañas increíbles que se alzan delante de tus ojos. La subida al Preikestolen es una experiencia en sí misma y las vistas allí arriba no defraudan para nada.

Etapa 2: Tailandia

tailandia nomada digital

Llegamos a la parte más deseada del viaje, la llegada al sudeste asiático. Y para empezar un rencuentro inesperado en Bangkok con nuestros amigos Ana y Sergio de escuelatravelhacking.com

Imagina el contraste al salir de Dinamarca con temperaturas invernales y llegar a Bangkok con 35 grados. Tailandia me pareció un país muy completo, desde la ajetreada Bangkok, la afamada Chiang Mai, el contraste de la Tailandia profunda que conocimos en el norte y las islas paradisiacas del sur. Además, si algo tengo que destacar Tailandia es su comida, todavía recuerdo el sabor del Khao Soi y de los Pad Thai de los mercados callejeros.

Loy Krathong Yee Peng

Mi experiencia destacada: Disfrutar del Loy Krathong y Yee Peng en Chiang Mai. Una experiencia única donde puedes sentir la emoción y la alegría en las calles. Tiempo de pedir deseos y disfrutar del espectáculo.

Etapa 3: Malasia

malasia nomada digital

El recorrido de norte a sur hacía que fuera más fácil cruzar hasta Malasia, ya que era cambiar de isla, desde Ko Lipe hasta Langkawi. De Malasia me sorprendió el contraste respecto a Tailandia, diferente religión y costumbres totalmente diferentes. De nuevo de norte a sur pasando por Penang, la selva y los campos de té para acabar en Kuala Lumpur donde pasamos las navidades haciendo housesitting. Bañarse en una infinity pool en Navidad no tiene precio.

taman negara

Mi experiencia destacada: Caminar sobre los puentes colgantes más largos del mundo en la selva de Taman Negara.  Llegar allí ya fue toda una experiencia porque el acceso principal es en barca, dos horas a bordo de una barca compartiendo espacio y mochilas con unas diez personas. 

Etapa 4: Singapur

singapur nomada digital

Volvemos a ir hacia el sur ya que Singapur nos pilla de paso y es un gran punto para ir a Filipinas. A pesar de ser un país caro y de estar pocos días me sorprendió lo cuidado que está todo y lo moderno que es el país. No parece que esté en el sudeste asiático, parece que has entrado a otro mundo. Es un destino que tiene un aeropuerto privilegiado en el que es muy cómodo hacer una escala.

singapur noche

Mi experiencia destacada: El espectáculo de luces y sonido que se hace cada noche. Totalmente imprescindible y alucinante el juego de colores y los efectos y las formas en el agua. Singapur me pareció increíble de noche, merece totalmente la pena pasar al menos una noche en el centro y pasear y disfrutar de la iluminación de la cuidad y de sus edificios enormes.

Etapa 5: Filipinas

filipinas nomada digital

Llegar a Filipinas es como volver a Tailandia, mismas costumbres y caos con diferente religión. Es muy llamativo ver la huella española en el país, pasamos por varías islas (Bohol, Camiguin, Siargao, Corón…) y pudimos disfrutar de playas paradisíacas, sin duda las mejores del viaje. En la parte negativa la parte del transporte y del internet que hace muy difícil trabajar como nómada digital. A pesar de todo un país para volver mil veces, eso sí mejor deja tu portátil a un lado.

buceo pamilacan filipinas

Mi experiencia destacada: El buceo en Pamilacan. Hicimos muchas veces snorkel, pero lo mejor fue la experiencia de disfrutar de un día espectacular de buceo en Pamilacan. Un día redondo compartido con algunos españoles que acabó con una comida local a un precio de risa.

Etapa 6: Australia

Cambio de continente para dirigirnos a Australia, la idea hacer la costa este australiana en campervan. Nada más llegar una experiencia fuerte: hacer snorkel en la gran barrera de coral, el mejor snorkel de mi vida (y era difícil superar a algunas zonas filipinas). Desde Cairns bajamos hasta Brisbane, Sidney, Melbourne y la brutal Great Ocean Road, interminables carreteras en una mega experiencia al ir en camper. Lo peor fue lidiar con el calor insoportable tropical de Queensland y lo mejor sin duda toda la fauna que pudimos ver en el viaje. A pesar que el Covid me jodió el GP de F1 de Australia tuve la suerte de celebrar St Patrick’s day con mi amigo Haritz de australiaje.com Para alguien que ha vivido en Irlanda casi 4 años un 17 de marzo siempre será especial 🍀.

fauna australia koala

Mi experiencia destacada: La fauna australiana en libertad. Kanguros, Wallabies, Serpientes, Wombats, los animales únicos de ese país hacen que el viaje merezca mucho la pena. Eso sí, si tengo que elegir a uno es el Koala, el animal más entrañable que he visto en mi viaje.

Etapa 7: Nueva Zelanda

nueva zelanda nomada digital

La pandemia del covid ya estaba haciendo estragos en medio mundo y conseguimos llegar el último día que el espacio aéreo estuvo abierto. Me considero muy afortunado porque era el país que quería ver a toda costa en el viaje. Después de casi dos meses de parón y lockdown, el día de mi cumpleaños el 14 de mayo pude empezar a hacerlo realidad. El gobierno neozelandés, que está dando una lección de cómo gestionar la pandemia dejó viajar por el país a partir de ese día. Un día muy especial del que ya ha pasado más de un mes. Hoy te hablo en Picton donde cogeré un ferry hacia la isla norte después de recorrer toda la isla sur en caravana.

viaje caravana nueva zelanda

Mi experiencia destacada: Muy complicado destacar solo una cosa de la isla sur de Nueva Zelanda, desde bosques élficos hasta lagos azules, fiordos, paisajes, caminatas…. Todo ello con un nexo común, el primer viaje en caravana que te da la libertad para hacer lo que quieras cada día, disfrutar de rincones únicos y despertarse en lugares increíbles.

Mi trabajo como nómada digital

Ayudando a emprendedores en la escuela nómada digital

El primer trabajo que he realizado en esta aventura ha sido la formación de futuros nómadas digitales. De la mano de la escuela nómada digital he enseñado con mi experiencia a como ser un nómada digital. No imaginaba que después de más de dos años de haber sido alumno tuviera la posibilidad de estar al otro lado. Ha sido una experiencia maravillosa y he podido ayudar a muchas personas a hacer sus negocios digitales realidad y a ganar dinero desde casa.

No voy a decir que ha sido un camino de rosas, he trabajado duro con mis almun@s para lograr que cumplieran el éxito de sus proyectos. Tras varios meses, muchos de ellos han conseguido pulverizar sus metas y la verdad es que es muy reconfortarte. Atrás quedan las sesiones grupales con todos ellos, cada vez desde un país diferente, tenía que rezar para tener una conexión aceptable y además lidiar con el cambio de hora. Muchas incertidumbres a las que me he tenido que enfrentar y sinceramente estoy bastante satisfecho de cómo fui superando algunas situaciones.

Este año he observado desde dentro que cada vez hay más personas que buscan una alternativa a un trabajo tradicional. Lo hemos visto claramente con la situación de la pandemia, poder trabajar desde cualquier lugar del mundo y sin jefe se va a extender más poco que tarde. Si quieres imitar mis pasos y los de muchos alumn@s tienes la posibilidad de acceder durante esta semana al training gratuito de la escuela nómada digital. Tú también puedes ser un futuro nómada digital y generar ingresos desde donde quieras.

Ayudando a personas como tú a gestionar sus finanzas personales

Como bien sabes, si has seguido este blog mi experiencia como nómada digital ha cambiado el tiempo que puedo dedicar en escribir y en otras facetas del proyecto. Sin embargo, siempre he querido mantener un hilo conductor en el que he enviado al menos una newsletter mensual a todos mis suscriptores con las últimas novedades financieras.

No era suficiente, por ello quería ayudar a algunas personas de forma personalizada a resolver sus problemas económicos y alcanzar nuevas metas financieras. Lancé el método ARFIC, un catálogo de servicios aprovechando el parón navideño que hice en Malasia, gracias a ello he podido ayudar a algunos lectores a como empezar a invertir, qué productos financieros son adecuados etc.

Puedo sentirme afortunado de poder enseñar finanzas personales y de responder a algunos mensajes cariñosos que me han llegado en este tiempo. Han sido momentos complicados para todos y quería compartir mi visión del problema del covid-19 y de sus posibles consecuencias, un artículo totalmente personal y libre dando mi opinión como nómada digital viviendo todo esto desde fuera de España.

Ser nómada digital no es para todo el mundo

Ser un nómada digital puede ser el santo grial, un estilo de vida que llama la atención porque en las fotos todo parece color de rosa. ¿Quién no quiere viajar alrededor de todo el mundo y no estar atado a un trabajo tradicional? Aquí verás los problemas y el lado menos bueno que me ha enseñado mi experiencia como nómada digital.

No estás de vacaciones, tienes que compensar tiempos

El nómada digital trabaja viajando, por tanto, combina el trabajo con el ocio del viaje. No es un trabajo de ocho horas, y por ello más si cabe tienes que ser capaz de trabajar a tope en el tiempo que tengas disponible. Esto requiere una buena capacidad de atención y de exprimir el tiempo hasta el último segundo. He trabajado desde en aeropuertos hasta en autobuses, es una situación que tienes que aceptar, se acabaron las comodidades de una oficina.

Esto requiere sacrificar tiempo y saber elegir bien cuando toca ocio y cuando trabajo. He estado en sitios de ensueño a los que probablemente no volveré en mi vida para escribir por ejemplo alguna entrada o ayudar a un emprendedor a resolver su problema o duda. Aceptar estas reglas como parte del juego hace también que el viaje tenga que ser muy lento.

Dependes de una conexión estable diaria

Este es uno de los problemas principales de un nómada digital, cada día estás en un sitio diferente y la conexión a Internet es imprescindible. Y evidentemente tampoco vale con cualquier conexión, en los países del sudeste asiático por ejemplo tienes verdaderas dificultades para encontrar algo decente. De los países que he visitado sin lugar a dudas Filipinas es el peor en ese sentido, aunque he tenido problemas en todos los países en algunos momentos del viaje.

Es muy frustrante tener todo listo para trabajar y que la conexión te juegue una mala pasada.  No queda otra cosa que aceptar las reglas y ser flexible en todos los sentidos, son cosas que no se pueden cambiar y no merece la pena perder el tiempo con ello. Un truco que he aprendido es comprar un router Mifi para tener una conexión de emergencia que funciona con una sim local. Este ha sido mi salvavidas en muchos días donde no tenía otra posibilidad.

Necesitas un colchón de seguridad para imprevistos

Estas en un blog de finanzas personales y este es el consejo financiero que puedo darte. Evidentemente, tenía una parte reservada para el viaje donde había previsto los gastos del viaje inicial. Sin embargo, el Covid ha roto los planes y por ejemplo he tenido que estar más tiempo de lo previsto en Nueva Zelanda que es un país caro comparado con lo del sudeste asiático.

Por ello es más que importante que tengas además del dinero previsto para el viaje tu colchón de seguridad bien formado y listo para usarlo. Además, por mucho que tengas una previsión de los gastos un viaje de estas características es difícil de estimar. En mi caso que era la primera vez en todos esos países tenía una idea del coste de las cosas que a veces no se cumplía. Todavía no he acabado el viaje, pero estimo que he gastado como una persona media (entre 10.000€ y 12000€ por persona). Basado en un viaje medio de una pareja donde hemos hecho un poco de todo.

Aprende a aceptar los imprevistos y el ritmo de vida en otros países

En este viaje tienes que aceptar los imprevistos que surjan, cancelación de medios de transporte, incomodidades y conformarte con servicios de alojamiento que están por debajo de Europa… Yo aprendí a aceptarlos como la experiencia del viaje, lo bueno de ser un viaje sin fecha de regreso es que aprendes a tomártelo con calma y a aceptarlo.

Otra de las lecciones que he aprendido es que el ritmo de vida y las costumbres son totalmente diferentes. Olvídate de hablar inglés en las zonas rurales de Tailandia, acepta las tasas que tienes que pagar en Filipinas y que en muchos momentos del viaje eres un dólar con patas. Tienes que aprender a regatear y a pagar sobrecostes en algunos lugares por el simple hecho de ser turista.

Las mejores ventajas y aprendizajes de ser nómada digital

Ahora vamos con las ventajas como nómada digital, aquellas que he valorado más durante el viaje. Conocía le teoría y ahora toca hacer una reflexión de los aspectos que considero más relevantes de este estilo de vida.

Trabaja con la flexibilidad que siempre quisiste desde donde quieras

Una nueva forma de trabajar donde los horarios te los marcas tú mismo. He podido trabajar en lugares de ensueño y a mi ritmo, he podido hacerlo sin tener que cumplir con los criterios estrictos de una empresa tradicional. He buscado la máxima calidad posible acabando con la burocracia de procesos sin sentido y los horarios de oficina de 8 a 5 de lunes a viernes.

Estamos en un nuevo paradigma donde el trabajo es más inestable y la revolución digital está cobrando cada vez más fuerza. Los tiempos de trabajar en una empresa hasta llegar a una jubilación está llegando a su final. Esta experiencia me ha enseñado a ser más flexible todavía y adaptarme mejor a los cambios que se están produciendo y que se van a producir en el futuro. Tener la libertad de poder trabajar sin estar bajo las leyes de un estado te brinda posibilidades adicionales que antes no había tenido en cuenta.

Viajar sin fecha de regreso te permite más experiencias

Hasta esta experiencia había viajado como la mayoría de los mortales, con los días de vacaciones que te corresponden y así año tras año. Me cansé de tener que elegir dónde ir, quería probar un estilo de viaje diferente y ser un nómada digital te permite viajar más lento y disfrutar de más cosas. He aprendido a viajar con más calma, a dejar que el viaje me sorprenda, a improvisar un nuevo plan sobre la marcha. Es totalmente imposible ver todo, así que aprendí a seleccionar lo que no quería perderme. 

Los políticos hablan mucho de conciliación laboral y personal, y de hecho cada vez veo más negro esta conciliación en un trabajo tradicional. Tener unos pocos días al año hacen que sea imposible conocer y disfrutar de experiencias que se tienen que vivir al menos una vez en la vida. Será lo que nos llevemos de este paso por este mundo, las experiencias vividas.

Otro estilo de vida es posible

Ser un nómada digital es moverse con otras reglas. Antes de salir del viaje había leído mucho sobre ello, pero no te voy a engañar, una cosa es la teoría y otra es llevarlo a la práctica. Cuando haces algo por primera vez y por tanto tiempo no sabes con seguridad si ese estilo de viaje va a encajar contigo o no. Había vivido en Irlanda los 4 previos al viaje y la experiencia que tenía por delante era totalmente diferente.

En el momento en el que seleccionas lo que vas a llevarte para empezar la aventura ya sabes que no hay marcha atrás. Tener que elegir lo que puedes llevar te permite tener un estilo de vida más minimalista y te das cuenta de lo que importa. Te despides de tu familia y amigos y aceptas que no volverás a verlos hasta dentro de muchos meses. Y te lanzas al reto y empiezas a vivir lo que tantas veces habías imaginado. Y puedo decir que merece totalmente la pena y que vivir viajando como un nómada digital es posible y se adapta a mi forma de ver la vida.

Aprende y valora las comodidades del mundo occidental

Vivimos en un mundo occidental donde normalmente nadie agradece lo que tiene. Una de las cosas que he aprendido es a valorar las cosas que tenemos en casa. Si eres español como yo te recomiendo que valores muchas de las cosas que tenemos y que podemos disfrutar por haber nacido allí. El acceso a la comida de calidad, a darte una ducha de agua caliente, a decir lo que piensas, a tener tus necesidades cubiertas. Y si, nuestros políticos demuestran cada día que no están a la altura, pero España es un gran país donde vivir y mientras más viajo más claro lo tengo.

He visto niños sin nada en Tailandia, darte una ducha con agua caliente en Filipinas es un lujo y hablar mal de la monarquía tailandesa es un delito. Estos son algunos ejemplos de algunas cosas que he vivido en el viaje que me hacen reflexionar acerca de nuestras comodidades y libertades en occidente. Prefiero ver el mundo con ojos de agradecimiento y aceptar que hemos tenido suerte de nacer donde hemos nacido.

El siguiente paso como nómada digital

Ahora mismo te escribo estas líneas mientras cruzo en ferry desde la isla sur a la isla norte en Nueva Zelanda. Estoy en el último país de mi primer viaje como nómada digital, listo a disfrutar del último tramo del viaje que siempre recordaré el resto de mi vida. Dentro de un mes aproximadamente si la situación de la pandemia no lo impide estaré de nuevo en casa, en Málaga.  Será el momento de pausar esta forma de viajar durante un tiempo.

La situación del covid hace que sea imposible seguir con el viaje, ya está siendo una quimera volver así que es tiempo de regresar a casa. Después de todo lo que ha pasado, nos apetece volver a casa, ha pasado mucho tiempo desde aquel 17 de septiembre del 2015 donde nos fuimos con nuestras maletas a Irlanda a probar fortuna. Nos hemos perdido muchas cosas en los casi 5 años que hemos vivido en el extranjero y es tiempo de disfrutar de nuestra familia y amigos.

Lo que tengo claro es que quiero que esto sea una pausa, quiero tener la flexibilidad de trabajar donde quiera y cuando quiera. No sé si viajaré tantos meses sin volver, pero no quiero volver a cruzar la línea de volver a un trabajo tradicional y aceptar las reglas autoimpuestas de lo tomas o lo dejas, hay otras alternativas posibles.

Y tú ¿quieres dar el siguiente paso? Desde hoy y hasta el 21 de marzo tienes acceso al training gratuito de las matriculas de la END para este 2022. Solo se realiza un lanzamiento al año y las plazas son limitadas. No pierdes nada por apuntarte y podrás implementar todo el camino que me ha traído hasta aquí. Otro estilo de vida es posible, empieza a construir tu trabajo del mañana, un trabajo que te permita aprovechar tus capacidades y que te dé flexibilidad total para disfrutar plenamente. Merece la pena intentarlo, te lo digo por experiencia.